El 12 de enero pasado, en la Llibreria Ramon Llull, tuvo lugar la presentación de la novela de Vicente Puchol, Vivir para la muerte. Participaron en la misma: Claudia Simón, Ángeles Casabó, y Mercedes Puchol. Enfocaron la novela, respectivamente, desde el punto de vista de la biografía de Vicente Puchol y sus relaciones con escritores valencianos, Juan Gil-Albert y César Simón especialmente; desde sus implicaciones y base jurídicas, para terminar con un análisis de la novela desde un enfoque literario y Psicoanalítico. Insistieron en la transcendencia del tema fundamental de Vivir para la muerte, el nazismo, y en la necesidad de que la novela se lea y se conozca el horror de una época que no debería repetirse nunca más.
Esta es la intención de Vicente Puchol al escribir este libro: dejar patente la necesidad de que la ética guíe a la literatura:
«La ética es la columna vertebral de la obra de arte. Sin ella, el lector no puede asentir a lo que exprese el autor, a menos que el autor se distancie de lo que escribe o tácitamente muestre su disconformidad».
Es necesario leer novelas como Vivir para la muerte, rara avis en el panorama literario español, para no caer en la tolerancia hacia posturas xenófobas y ultranacionalistas. Porque como dijo Hannah Arendt:
«Lo más grave en el caso Eichmann era precisamente que hubo muchos hombres como él, y que estos hombres no fueron pervertidos ni sádicos, sino que fueron, y siguen siendo, terroríficamente normales».
De izquierda a derecha: Ángeles Casabó, Mercedes Puchol, Claudia Simón y, de pie, Teresa Garbí.
Claudia Simón, Fernando Delgado y Mercedes Puchol.
Vicente Puchol y Teresa Garbí.